viernes, 14 de agosto de 2015

Emoliente

El emoliente es una bebida que se prepara en base a granos tostados de cebada, extractos de hierbas medicinales, azúcar y jugo de limón. Es de bajo contenido nutricional, aunque puede aportar a la dieta algo de carbohidratos, minerales y vitaminas. Esta bebida medicinal se encuentra en cada puesto de comida ambulante, así como en restaurantes y diversos establecimientos.

Está hecha a base de cebada tostada, a la que se le agregan diversas hierbas medicinales tales como cola de caballo (Equisetum spp.), llantén (Plantago lanceolata), boldo (Peumus boldus), muña (Minthostachys setosa), sangre de grado (Croton lechleri) y otras más.

La mayoría de estos ingredientes tienen una acción positiva sobre el sistema digestivo. Muchas de las hierbas medicinales usadas tienen también propiedades cicatrizantes, desinflamantes, enzimáticas e inclusive antibióticas y antivirales, aunque no se puede decir exactamente que trasfieran todas estas propiedades al emoliente (debido al calor, concentración baja y mezclas) definitivamente sí se puede afirmar que conforman una bebida saludable, refrescante y curativa. Ya en el siglo XIX se describía la bebida de cebada con jarabe de goma como el remedio para algunas enfermedades de la mujer en los libros de medicina de la época.

La mayoría de estos componentes son ricos en fibra y, unidos a la acción de la linasa, ingrediente principal en el emoliente, y una de las mejores fuentes de fibra, garantizan una buena influencia en el tránsito y salud intestinal previniendo malestares digestivos y aliviando el estreñimiento.

Si no es posible viajar a un país donde el emoliente se consuma masivamente, puedes probar prepararlo en casa, tiene muy buen sabor y se puede tomar tanto caliente en el invierno, como frío en el verano.

Receta clásica:
  • ½ taza cebada tostada.
  • 100 g cola de caballo.
  • ½ taza linaza.
  • 1 puñado de brotes tiernos de alfalfa.
  • 5 hojas grandes de llantén o boldo.
  • Azúcar o jarabe de goma al gusto.
  • Chorrito de limón.
  • 4 L de agua.
Preparación: en una olla con agua, hierve la cola de caballo, la linaza, la alfalfa, la cebada y el llantén/boldo durante 20 minutos. Retirar del fuego, dejar reposar durante 15 minutos y colar. Endulzar con azúcar al gusto. No te olvides de agregar jugo de limón al gusto al momento de servir, ésto le dará un sabor especial.

RECUERDA QUE: La información contenida en este sitio tiene el propósito de ofrecer un conocimiento general, no tiene como fin el sustituir la consulta con el médico. Usted debe consultar con su médico si presenta alguna condición en su salud.

Fuente:
http://www.lineayforma.com/nutricion/propiedades-del-emoliente.html

miércoles, 5 de agosto de 2015

La sopa

La sopa es un alimento de la cocina tradicional que no debemos olvidar. Es sabroso, nutritivo y muy versátil. Además, no sólo es apropiado durante los meses de invierno ya que hay sopas calientes (de lo más apetecible contra el frío) pero también hay sopas frías (de lo más refrescante contra el calor).

Por si no se es muy amante de este plato vamos a explicar algunas buenas razones para incluir la sopa en nuestra dieta.

Algunas buenas razones para tomar sopa:

El consumo de sopa ayuda a disminuir la ingesta de alimentos: tomar sopa antes de comer genera más saciedad y reduce el apetito. Estudios han confirmado que los individuos consumen 20% menos calorías cuando incluyen sopa en su alimentación respecto a cuando no se ingiere. Por supuesto, siempre debemos escoger versiones normales de sopa o bajas en calorías y no aquellas más calóricas con alto contenido graso.

La sopa disminuye la densidad energética de la dieta: la densidad energética es la relación existente entre el volumen y las calorías aportadas por la dieta, a mayor volumen y menor contenido calórico, menor densidad energética. En el caso de la sopa, al tener alto contenido en agua y muy pocos alimentos sólidos, tiene una densidad calórica baja, es decir, pocas calorías por porción. Ésto convierte a la sopa en una gran aliada de los planes para perder peso.

Tomar sopa es saludable: la sopa no sólo es un alimento saludable por sí solo, sino que favorece la adquisición de otros hábitos que conforman una dieta sana. Existen muchas variedades de sopa, pero la mayoría de ellas contienen alimentos muy saludables y un gran aporte hídrico, por ejemplo: de frijoles, de arroz, de pollo, de verduras, de fideos, de avena, etc. Además, la sopa contribuye con el hábito de comer despacio y tomarse un mínimo de tiempo para ingerir los alimentos, es un alimento que suele compartirse con otros comensales, aspecto que se está perdiendo y merece ser rescatado en nuestra alimentación. Incluso, el método de cocción que se utiliza en su elaboración permite aprovechar todos los nutrientes sin desaprovechar ninguno, y evitamos lo que ocurre cuando hervimos verduras que quedan todos los nutrientes en el agua de cocción y éste generalmente se deshecha en lugar de convertirlo en un rico caldo.

Es muy fácil de preparar: la sopa es una de las comidas saludables más fáciles de realizar. Para elaborar sopa sólo debemos colocar en una cacerola con agua hirviendo todos los ingredientes que queremos que contenga, siempre teniendo en cuenta que la proporción de agua debe ser considerablemente superior a los sólidos.

RECUERDA QUE: La información contenida en este sitio tiene el propósito de ofrecer un conocimiento general, no tiene como fin el sustituir la consulta con el médico. Usted debe consultar con su médico si presenta alguna condición en su salud.

Fuente:
http://www.vitonica.com/alimentos/4-caracteristicas-que-convierten-la-sopa-en-un-alimento-saludable
http://comeconsalud.com/alimentacion-nutricion/razones-tomar-sopa/